Se acercan las fechas decembrinas y con ello el uso de pirotecnia en la ciudad. Sabemos que los fuertes estruendos que provoca afectan a nuestras mascotas produciéndoles temor y comportamientos indeseados, pero ¿cómo debemos reaccionar ante ellos? Aquí hablamos un poco más al respecto.
Los fuertes sonidos provenientes de la pirotecnia pueden incluso aturdir a las personas y crear malestar cuando son muy fuertes, estos efectos son multiplicados en animales como perros y gatos ya que tienen un sentido del oído mucho más sensible que el de los humanos y, en consecuencia, lo que para nosotros es un sonido fuerte, para ellos resulta doloroso.
Al estar expuestos a estos estruendos, las mascotas llegan a presentar daños considerables en su audición, además de que podrían llegar a generar una fobia.
Es común que veamos a nuestras mascotas asustadas por los estruendos, pero deberíamos comenzar a analizar realmente el daño que podrían presentar, ya que son muy escasos los dueños que atienden a sus mascotas cuando son afectadas por sonidos fuertes.
Si bien el miedo es una respuesta natural que va desde una mascota que se esconde y tiene vocalizaciones, se pueden presentar respuestas orgánicas que no debemos ignorar, tales como aumento de la presión arterial y respiratoria, incremento en la glucosa, coagulación sanguínea, estrés a largo plazo y fobia, además de que el animal puede desarrollar conductas destructivas y agresividad. Lo anterior representa una amenaza para la salud e integridad de nuestras mascotas.
Una respuesta desmedida ante los estímulos de la pirotecnia ocasionales es motivo de consulta con un profesional de la salud animal. Lo relacionado al miedo y ansiedad puede resolverse mediante técnicas de modificación de conducta como la desensibilización y el contracondicionamiento, siempre de la mano de un profesional. Enseñarle a nuestra mascota que estos ruidos no son una amenaza real para su integridad mejorará su calidad de vida.
¿Qué pasa cuando no podemos controlar la exposición de nuestra mascota al ruido de la pirotecnia?
Siempre lo ideal es no exponer a nuestras mascotas a este tipo de ruidos estruendosos ya que, en mayor o menor medida, les genera un estrés innecesario. Sin embargo, podemos realizar una serie de acciones para minimizar el estrés generado cuando no los podemos aislar de la pirotecnia.
El lugar seguro.
Podemos crear un espacio en nuestro hogar que sirva de refugio para nuestras mascotas cuando los estímulos sonoros estén presentes. Un lugar con asociaciones positivas, cómodo y lo más alejado posible del ruido.
- Selecciona el lugar. Busca o crea un espacio de “escondite” para tu mascota. Debe ser pequeño y oscuro con una entrada de fácil acceso. Lo ideal es que el lugar esté en la zona más tranquila del hogar dentro de lo posible.
- Comodidad y familiaridad. Lo siguiente es hacer de ese escondite un lugar acogedor, coloca dentro una camita o una manta que tu mascota reconozca, que esté impregnada de olores familiares y haga su estancia más cómoda.
- Preparación. Si bien este refugio para nuestra mascota puede ser un sitio permanente, podemos también crear este espacio provisional para aquellas temporadas de mayor actividad de pirotecnia como lo son las fechas decembrinas. De ser así, procura instalar este refugio alrededor de 3 semanas antes de esas fechas para que tu mascota lo reconozca y se familiarice con su espacio.